GUARRADA

guarrada. (De guarro1). 1. f. Porquería, suciedad, inmundicia. 2. f. Acción sucia e indecente. 3. f. coloq. Mala pasada. Real Academia Española

jueves, 3 de noviembre de 2016

Luis María Anson, a favor de la censura en Internet. (Rambla Libre)


 Luis María Anson, a favor de la censura en Internet (Ya quisiera)

http://ramblalibre.com/2016/10/18/luis-maria-anson-a-favor-de-la-censura-en-internet/



Anson o el retorno a la censura.
Redacción

El periodista Luis María Anson ha hecho unas declaraciones en México, al periodista José Cárdenas, en las que se muestra partidario de la censura en Internet. Vuelve así a sus tesis juveniles, cuando se mostraba completamente contrario al sufragio universal y consideraba un peligro y una herejía la libertad de expresión.

Hemos solicitado a nuestro colaborador Ignacio Fernández Candela su opinión sobre esas declaraciones:

“Las aspiraciones de Luis María Anson sobre la regulación de la libertad de expresión son comprensibles existiendo ilimitación por internet para poder denunciar públicamente aquellos abusos que antes se silenciaban tras la manipulación de los despachos.

Activar al máximo el derecho de esa libertad y proponer penalizar a los que lo exceden, según él, es manifiestamente incoherente y contradictorio, y en todo caso una sugerencia intolerante que al periodista le gustaría satisfacer para ocultar un pasado y un presente incómodos a sus ambiciones personalistas, teniendo como tiene muy engañado al público del mundo allá donde vaya. Es de fácil perorata y nulo ejemplo ético personal. Demostrado según sus obras que dicen más que sus fútiles palabras.

Los excesos de la libertad de expresión son una quimera de Anson pues ya está suficientemente contemplado desde el punto de vista jurídico. Otra cuestión es que este democrático intolerante desee una censura-que es a lo que alude- para silenciar las vergüenzas que van aflorando de su vida personal y profesional a raíz de los abusos laborales practicados contra personas honradas que lo denuncian”.

CNI Y EL INCORREGIBLE ANSON (Publicado en Rambla Libre)



CNI y el incorregible Anson



http://ramblalibre.com/2016/11/02/cni-y-el-incorregible-anson/

Luis María Anson. /Foto: YouTube.com.
Ignacio Fernández Candela. Escritor.

A tenor de lo que compruebo personalmente de Luis María Anson, respecto a sus usos éticos de dudosa fiabilidad aprovechándose del trabajo ajeno, y lo que conozco del conjunto sobre el carácter especulativo de su carrera profesional-basada en el premio desmesurado por servicios prestados, para mayor interés especulativo de los poderes a los que ha vivido arrimado durante décadas-, el último desvarío en El Mundo ejerciendo de correveidile, al más puro estilo del matonismo, advirtiendo públicamente a Pablo Iglesias de que no se salga de las líneas del Sistema, roza el ridículo impenitente que solo puede provocar su afán de protagonismo, ansioso por recuperar la  influencia perdida.

¿El CNI le susurra al oído las condiciones patrióticas con las que todo borrego ha de pasar con mansedumbre por el rodillo del orden establecido, salvo pena de que se concentren informaciones incómodas que puedan subyugar al rebelde, con escarnio público y exhibición de vergüenzas particulares incluidas? Tremebundo lo de Anson.

O continúa siendo una escurridiza anguila periodística que discurre con facilidad por todas las breñas de las bambalinas del poder oculto, o  es un indiscreto e imprudente  que no calibra el alcance de sus ambiciones, propagando bulos amarillistas basados en especulaciones sin sólido fundamento.
En este caso más valdría que la senectud le impidiera calcular el alcance de sus despropósitos ególatras, tal y como hizo atacando a El País cuando dirigía el ABC con el fin de captar más lectores. Trucos baratos de lo trilero asociado a lo periodístico, especialidad del segundo Joaquín Vila,  con tal de embolsarse mayores dividendos y fama mantenida.

Más valiera que fuera así porque si hay fundamento en la amenaza, estaríamos avivando brasas aparentemente extintas de las ínfulas dictatoriales que aparentemente dijo el académico combatir. Aunque a estas alturas de esta extraña democracia ya se sospecha cómo ha funcionado la corrupción por sistema y subrepticiamente; la que aún no se ve, no la descubierta cuyos daños pueden ser menores que los que verdaderamente estamos padeciendo sin identificarse a los verdaderos culpables.

No siendo Pablo Iglesias santo de mi devoción es de alabar la corrección política con la que ha recogido este guante lanzado por el impetuoso Anson, para convertir la advertencia en un ariete contra un Gobierno que ya inicia debilitado la legislatura y con la credibilidad en cuarentena. La imprudencia de Anson en sus ambiciones personalistas, una vez más, sería más deseable por oficiosa que la supuesta oficialidad pretendida al pronunciarse en el aviso contra el avispado líder podemita.

Llama la atención, en la derrota de su influencia que el periodista ha ido perdiendo con el paso del tiempo, la referencia a múltiples fuentes en sus artículos como si él fuera muñidor exclusivo de los poderes fácticos, y hasta inciertos, en esa suerte de ciencia ficción que se ha ido montando con el objetivo de acaparar la atención, y los beneficios monetarios que ello conlleva, con tal de no perder la comba del protagonismo del que tanto gusta alardear.

Ególatra oficioso o indiscreto del oficialismo, lo cierto es que Luis María Anson ha perdido la respetabilidad de tanto malgastarla.