GUARRADA

guarrada. (De guarro1). 1. f. Porquería, suciedad, inmundicia. 2. f. Acción sucia e indecente. 3. f. coloq. Mala pasada. Real Academia Española

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Luis María Anson en el País de las Maravillas




Soy muy intuitivo, siempre lo fui. El 11 de Noviembre del 2013, mientras batallaba por erradicar el drama de los Inversores a petición de José María Ruiz-Mateos ( y a fe mía que luché pública y privadamente por sembrar un trabajo más que honrado-EN REALIDAD UNA PROEZA SACRIFICADA, POCO COMPRENDIDA Y HARTAMENTE DENOSTADA por muchos hipócritas, ignorantes y malintencionados y codiciosos) cuya cosecha no está perdida, dependiendo de otros que la han trabajado fuera de España también-, 

http://laverdadocultadenuevarumasa.blogspot.com.es/2015/10/el-origen-del-drama-de-los-pagares.html 

 http://laverdadocultadenuevarumasa.blogspot.com.es/2015/02/mi-respuesta-al-banquero-del-proyecto.html

...escribí este artículo tratando la tibieza de Luis María Anson para no comprometerse con temas escabrosos que podrían haber perjudicado su raudo ascenso social.

Esto es lo que dije entonces, quizá previendo lo que me sucedería después con él al tratarlo en persona; a él y a su séquito de falsedad que habita en El Imparcial.es.

ANSON EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS

En esta España vilmente dañada, nefasto es el perjuicio que se ha sufrido a manos de maleantes como la indolencia de los testigos acobardados ante los males padecidos durante más de treinta años. Algunos de esos testigos  han creado  una especie de realidad paralela, tan academicista como falsaria, que sólo se la cree quien está al margen moralmente de lo que verdaderamente los ciudadanos están padeciendo.

  En este país hay muchas medias tintas que encubren una situación escabrosamente desintegradora, conformismos alimentados por intereses personales que se desinteresan de la verdad por si fuera tan arriesgada como para atraer enemigos poco fáciles de controlar. La tibieza es un arma de supervivencia en lo cobarde  y algunos la usan para flotar en medio de un naufragio mientras lucran sus carreras profesionales… pero el flotador de la demagogia termina siempre pinchando.

  Ansón puede parecer el reputado hombre sabio de una democracia que después hemos descubierto hecha de mentiras; nada es lo que parecía siendo entonces esa sabiduría una falacia hecha a medida de los grandes beneficiados que han ejercido un poder omnímodo desde las sombras. Porque Luis María Ansón pertenece a la oscuridad de una realidad paralela que los españoles no viven en el día a día, siendo ya más de tres décadas de embustes que no se sostienen ni con canelas finas ni discursos falaces que no se identifican con la penosa realidad de España.

  Antes colaba el discurso de la honorabilidad de un país construido desde el espíritu de la Transición, pero ahora ese espíritu se ha develado como una excusa para robar a manos llenas ese país hasta convertirlo en una ruina que el socialismo ha provocado de manera sistemática. No cabe defensa de forajidos viendo las consecuencias de tantos destrozos.

  Cuando Ansón pregona la honradez de Felipe González, dan ganas de saber qué impulsa a una mente tan poco dada a pronunciamientos incondicionales para ensalzar a quien se compró la impunidad de sus delitos vendiendo la seguridad económica de todo un país.

http://www.elimparcial.es//a-espana-le-conviene-un-psoe-robusto-130537.html

  Después de la Conferencia Política, Ansón aboga por un PSOE fuerte al estilo del gobierno liderado por Felipe González, el capaz ladrón que salió ensalzado después de robar el 10% del PIB español, Rumasa incluida con la que se lucraron intereses particulares pasando factura de dos Billones de pesetas a la ciudadanía. No pierde la oportunidad de arrimarse a la influencia, de restregarse solícito ante la misma flor y nata que ha envilecido un país, ante el orquestador de que la influencia política ganara la mano a la independencia judicial de la que carecemos en este fingido estado de derecho, sólo posible en los magines de un fantástico cuenta cuentos como Luis María Ansón.

  Basta no profundizar en los entresijos de acontecimientos que han ocasionado las malignidades que tantos sufren, para  ser escurridizo en lo arriesgado pero enaltecido en lo previsible. Ansón se procuró un respeto, callando la verdad que no le convenía dar a conocer. Porque en tanto algunos pretenden que un país aniquilado se remonte a los años antes de la matanza del 11-M, como si jamás hubiera existido, otros, la inmensa mayoría de la población, deducen que nada es como parece y que si la corrupción hoy campa a sus anchas fue porque siempre lo hizo, sólo que entonces de manera solapada, inadvertida y disimulada.

   Desmerecido  respeto se ha profesado a tantos que han permitido el expolio permanente y las estrategias ocultas que han abandonado a la deriva un pueblo de continuo explotado y que paga de su bolsillo los desaguisados políticos. Se complació una cohorte de arribistas que se repartieron el tinglado social y económico, mientras se plantaban las bases de corruptelas que décadas después no sostuvieron el complejo entramado de una deficitario país, de amoralidad inconfesable, donde primó el interés particular hasta desfondar la economía nacional.

España se inició en el delito aceptado por sectarismo jurídico con el latrocinio de Rumasa y pasó a mayores envergaduras de criminal corrupción con el golpe del 11-M y su posterior enterramiento en los tribunales.

  Luis María Ansón escribe como hace veinte años. Se sacude las migas del pastel envenenado que hicieron comer a los españoles y aboga por la creación de un horno donde seguir produciendo esos dulces pasteles democráticos que terminarán aniquilándonos. ¿Un PSOE fuerte que robe o pacte secretamente con los enemigos del país? Plausible el disimulo del periodista para ignorar los daños y dar por bueno lo nefasto.

  No son válidas esas líneas argumentales de continuidad sobre la Transición democrática, cuando los hechos han demostrado que fue un espejismo en tanto se pergeñaba este infierno de codicias e intereses ocultos de la actualidad. Ese averno fue posibilitado  cuando el felipismo politizó la Justicia para que cualquier criminalidad fuera pasada por el tamiz de sectarios tribunales normalizando el delito, continuado y aceptado.

  Ansón sigue escribiendo sus columnas con una credibilidad rayana en lo vergonzante, porque decir que Felipe González fue un hombre honrado hasta considerarle un benefactor patrio, es de un descaro fabulado que roza lo  indecente.

  La Historia de España contemporánea se ha escrito con plumas de algunos beneficiados que durante las tragedias se han mantenido al margen de pronunciamientos taxativos, repartiendo críticas y ditirambos a partes iguales y cuidándose mucho de no desestabilizar la balanza de la conveniencia personal. Porque ser  honrado a ultranza en España no es buen consejo para la especulación. Amontonar beneficios con una neutralidad efectista es una buena filosofía de ganancia en lo personal, aunque pierda lo colectivo. Lo importante es mantenerse en la brecha contentando a unos y a otros, asegurándose un estatus y ganándose el respeto de lo interesado.

  España se ha construido, durante su extraña historia constitucional, con encubiertas tramas que hoy afloran y que demuestran el pútrido cariz de los protagonistas que la hicieron posible, para desembocar en este laberinto de incertidumbres donde todo puede pasar en el futuro.

  Ignorarlo puede parecer una necedad siendo ya tan evidente, pero también la pose perfecta para librarse de la quema y ser testigo privilegiado, y a salvo, de la destrucción que otros han de sufrir.

Ignacio Fernández Candela

2 comentarios:

Unknown dijo...

Parásitos acomodados y sin escrúpulos. ¿Se dan por aludidos? Estas gentes no cambian sus vidas vacias....llenar sus bolsillos , es lo único que les importa

Oscura Forastera dijo...

No me cabe en la cabeza que se defienda un gobierno y aun gobernante corrupto, no entiendo cómo se pude decir que hay políticos honrados, no puedo ni por asomo comprender como se puede defender o dar el adjetivo de honrado un canalla que propició la prostitución de la justicia para su beneficio y el de sus amigos. El día a día en este país es cada vez más insoportable e inaguantable. No se puede sobre llevar ni vendiendo los órganos ilegalmente. ¿Sentirse aludidos? Qué vergüenza, sería mejor que se sintieran CULPABLES, miserables ladrones de vidas, España necesita abrir los ojos, gracias a Dios algunos los tenemos abiertos y nos damos cuenta de lo que ocurre, otros los tienen entrecerrados por conveniencia, el resto prefiere no ver sabiendo lo que está ocurriendo, para sí continuar teniendo un nombre, grabado en oro en sus tarjetas de vista.